viernes, 30 de septiembre de 2011

Dejar las cosas pasadas, donde deben de estar :::pasado:::… le da a la vida un nuevo sentido

Dejar ir para siempre las lágrimas que nos hicieron daño, levantarse de nuevo con la convicción de que ahora será diferente, caminar hacia adelante sin mirar atrás, como si no importase nada más. Convencerse a uno mismo que, la vida está llena de subidas y bajadas.

Dejar ir aquello que tanto se amó, a aquello que pedía libertad. Los amores no correspondidos, parecen mortales y letales, pero hay que aprender a contrarrestar ese dolor, ese veneno. Hay muchas formas para superarlos y no hundirse…

Yo estuve hundida por algún tiempo, por un amor no correspondido, estuve a su lado, esperando pacientemente a que sintiera lo mismo, pero lo cierto es que, sólo gasté mi tiempo, sólo estuve esperando en vano… al final, terminó pidiendo libertad y dejándome en libertad…

Y fue entonces cuando comprendí lo que quería decir libertad; para mí es algo así como: ‘dejar de amar a quien no quiere ser amado’. Puede tener muchos contrastes, pero, algo es cierto, no puedes seguir llorando, sufriendo, amando a quien sólo te hace daño. Porque la vida sigue, nunca se detiene y el tiempo no perdona.

Dios me enseñó una lección con este caballero, que se robó muchas lágrimas de mis ojos; comprendí que, cada persona está en nuestra vida para hacernos crecer, para hacernos fuerte, para aprender; en el principio fue completamente doloroso, asumir todo lo que conlleva, pero no paré, no me detuve y hoy, hoy mantengo una enorme sonrisa por que haya pasado, por lo que pasó; hoy me río de las tontas lágrimas del pasado, de las locuras, de las palabras ociosas que se dijeron…

Verlo como amigo, tomará su tiempo; así como tiempo me tomó amarlo, tiempo me tomará quererlo como amigo, no he dejado de leer, ni dejaré de hacerlo, he encontrado muchas cosas que me han ayudado a superar el adiós, y a ver con nuevos ojos los ‘hola’ que uno a uno van llegando.

No te detengas por un amor que no te da el valor que mereces en tu vida, no te cierres a la esperanza de conocer a alguien más, puede que sea otra persona la que llegue, y llegue para quedarse para toda la vida.

Quizá Dios quiere que conozcas a muchas personas equivocadas, para que al final encuentres a la persona adecuada, mientras tanto aprende, aprende lo más que puedas, no dejes de aprender de tus experiencias, arriesga todo, menos tu cuerpo…

Entrega todo, menos el cuerpo, porque eso, eso es lo que al final nos queda, para levantarnos con fuerza; tu cuerpo, tu bello templo, tu estructura humana, tu humanidad entera, valórate, quiérete, ámate…



Artículo interesante que encontré:

Cuando uno termina una relación necesita hacer un duelo. Este proceso consta de tres etapas: el dolor, el odio y la indiferencia. Sin embargo puedes lograr que haya una cuarta llamada el amor incondicional que se dará justo cuando hayan pasado las tres anteriores. Se trata de hacer un ‘borrón’, pero no cuenta nueva…. en esa misma cuenta puedes anotar todas las cosas buenas que él tiene y que te hacen quererlo como persona, aunque nunca más vuelva a estar contigo como pareja

:::: Finalizar una relación no es una determinación fácil, pero si es una decisión tomada debes seguir adelante y mantenerte en ella. ::::

El adiós definitivo.
1. Si lo que se busca es cerrar el círculo, vale la pena que intentes acabar cualquier contacto. Evita verle o hablarle, recordando siempre los motivos por los que dejaste la relación. Por supuesto esto incluye acabar con los mensajes de texto, correos electrónicos o cualquier forma de comunicación personal o virtual.

2. Deja de buscar un momento para compartir juntos, eso es darle esperanzas y oportunidades para seguir intentándolo cuando tú quieras.

3. Ni visitas, ni comidas, ni una salida solos, mucho menos pretender que siga comportándose como tu pareja, cuando tú quieras. No busques recurrir a él en tus momentos más tristes o cuando tengas problemas, para eso están tus amigos.
4. Intenta recordar que esa relación ha terminado y él ya no es tu pareja.

5. Al terminar una relación es importante dejar claro que es definitivo. No dejes puertas abiertas pensando en el futuro, reactivar una relación que ha muerto es muy difícil, por eso evita la ambigüedad o dar falsas esperanzas, eso puede ser muy doloroso y cruel.

6. Finalmente deja de engañarte buscando una nueva oportunidad ya que si la relación funcionara, fuera buena, nunca habría pensado en dejarla.

7. Asume el riesgo de perder a tu pareja y ábrete a conocer nueva gente, aunque no es un reto fácil, debes dejar a esa persona continuar su vida y tú darte la oportunidad de seguir con la tuya, créelo esa puede ser la mayor enseñanza de esa relación


No hay comentarios:

Publicar un comentario